Parece que todos conocemos la vitamina C. La asociamos con el color amarillo y los limones, pero resulta que ese no es el panorama completo. Para comprender dónde, cómo y cuándo la vitamina C puede ayudarlo, y ciertamente es extremadamente importante para la salud humana en general – blog, es necesario comprender cómo funciona. También es bueno saber qué alimentos consumir.
¿Por qué una persona necesita vitamina C?
Una propiedad importante de la vitamina C es que es soluble en agua, lo que significa que el cuerpo no puede almacenarla a largo plazo. Esto significa que es importante consumir los nutrientes adecuados de forma regular. Cantidades suficientes en el cuerpo son importantes porque la vitamina C afecta muchas funciones. Está involucrado en la formación de colágeno, que es una proteína clave en el cuerpo y es responsable de la salud de las articulaciones, los dientes, los huesos, así como la piel y el cuero cabelludo y las uñas saludables. Forma parte del tejido conectivo y muscular.
La vitamina C también es un antioxidante, lo que significa que ayuda a eliminar ciertas sustancias que son dañinas para el cuerpo y cuya acumulación causa problemas de salud. Estas son sustancias oxidativas que se producen como resultado de procesos naturales o después de la exposición a la contaminación. El estrés oxidativo tiene un efecto negativo en las células y puede dañarlas. La vitamina C, por otro lado, limita este tipo de inflamación y, por lo tanto, evita que se convierta en formas más graves, a veces incluso en una forma de cáncer.
El escorbuto es una enfermedad bien conocida de los marineros, que causaba que los marineros en viajes largos sufrieran de articulaciones hinchadas, dientes flojos y encías sangrantes, mayor agotamiento y anemia debido a la falta de alimentos frescos con vitamina C. La vitamina C también ayuda a la absorción de hierro, favorece la cicatrización de heridas y, como es bien sabido, ayuda a fortalecer el sistema inmunitario.
Beneficios de la vitamina C. Además del hecho de que las personas que consumen suficiente vitamina C curan las heridas más rápido debido a una mejor producción de colágeno, la vitamina también tiene efectos positivos sobre el corazón y el sistema vascular.
Estos incluyen la expansión de los vasos sanguíneos estrechos, la prevención de la presión arterial alta e incluso pueden tener un efecto en la reducción del riesgo de enfermedades del corazón. La vitamina también ha mostrado algunos resultados positivos en la diabetes. De hecho, los médicos han observado una reducción de los niveles de azúcar en sangre en pacientes que toman regularmente un suplemento de esta vitamina.
Además de los niveles de glucosa, la presión arterial también ha bajado.
Algunas enfermedades oculares, como las cataratas y la degeneración macular, están relacionadas con la edad. Se cree que la vitamina C reduce el riesgo y ralentiza el desarrollo de estas afecciones precisamente por sus propiedades antioxidantes. Este efecto antiinflamatorio también tiene un impacto positivo en otros problemas. El flagelo moderno de la contaminación del aire es malo para la salud en general, pero algunas investigaciones han identificado que la vitamina C, en combinación con otras sustancias, puede aliviar los síntomas relacionados con la contaminación, como el asma u otras enfermedades pulmonares.
La vitamina C también puede ser beneficiosa en las reacciones alérgicas que desencadenan respuestas inflamatorias, y la vitamina tiene un efecto calmante. Incluso se ha demostrado que las personas alérgicas tienden a tener niveles más bajos de esta vitamina. Por último, pero no menos importante, la vitamina C también es un ingrediente popular en los cosméticos, ya que ayuda a contrarrestar los efectos de la contaminación urbana en la piel.
Vitamina C adecuada.
Para asegurar suficiente vitamina C, que es la base para la prevención de enfermedades e inflamaciones, se deben consumir diariamente verduras y frutas frescas. Aunque es posible que prefieras las verduras cocidas, es bueno saber que el tratamiento térmico, especialmente a altas temperaturas, puede reducir significativamente el contenido de vitaminas, así que asegúrate de comerlas crudas y crudas de vez en cuando.
Los alimentos ricos en vitamina C incluyen pimientos rojos, fresas, toronjas y otras frutas cítricas, kiwi, piña, tomates, papas y una variedad de vegetales de hojas verdes.